A través de las constelaciones familiares podemos mirar un asunte que de alguna manera nos aqueja, y que con las herramientas con las que contamos no podemos resolver. Nos dan la posibilidad de mirar desde el plano del alma a que dinámica inconsciente estamos siendo leales cuando repetimos o reproducimos situaciones que desde la conciencia sentimos que no elegimos.

 A lo largo de un taller o una sesión individual encontramos movimientos que nos atraviesan y sin embargo, generalmente, ni siquiera sospechábamos. Aun así los reconocemos y le dan sentido a la comprensión profunda de nuestro asunto a tratar.

Pertenecemos a un sistema familiar, laboral, social; y estamos profundamente atravesados por nuestra trama de relaciones. El orden en estas relaciones es necesario para que el amor pueda fluir. El orden es una manera de ubicarnos en nuestro lugar.. con la fuerza de la vida, con la mirada puesta hacia adelante.. en lo propio,  en nuestro destino.

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 ¿Cuándo buscamos la solución en las constelaciones familiares?  Cuando entendemos que desde lo racional no encontramos la solución a nuestros problemas. Cuando necesitamos una mirada más amplia.. una mirada neutra que ayude a traer a la consciencia eso que opera en lo profundo y no está pudiendo ser visto.  Las lealtades invisibles en la trama familiar.. a veces estar en un lugar desordenado en relación a nuestros padres;  o algún, tal vez lejano en las generaciones, asunto pendiente que busca emerger y nos toma.. o nos ponemos al servicio de esto de forma inconsciente.

Las constelaciones familiares pueden trabajarse de manera individual o grupal y son una herramienta que surge en estos tiempos permitiéndonos en poco tiempo, y siempre desde lo que cada uno puede y está dispuesto a  abrirse al trabajo, transformar de raíz algunas tendencias o sentires que afectan nuestra vida.